sábado, 4 de julio de 2009

LOZOYA



Lozoya


Lozoya como su río
divina ciudad naciente
agua pura en su corriente
serpenteando con su brío.
Con su fuerza y su roció
la fábrica de papel,
se movió, cual carrusel
al igual que sus molinos,
harineros con sus finos
detalles como un tropel.

Esta villa medieval
con bello puente romano
Vanto, que te da la mano
con su media arcada oval.
La Iglesia muy conceptual
con púlpito plateresco
aire gótico tan fresco
en su bóveda genuina
nos hace ver la divina
razón de lo pintoresco.